Las palabras nos motivan o hieren profundamente porque los seres humanos somos demasiado frágiles, emocionalmente tan delicados que las palabras tienen el poder de afectar nuestras vidas.
Aquellas personas que nos hacen comentarios negativos o hirientes merecen ser calificadas como "gente tóxica" o desgastante; y pueden ser cualquiera: un amigo, un hermano, un jefe, tu mamá o tu papá, e incluso la pareja. Sus comentarios sabotean de alguna manera nuestros esfuerzos por llevar una vida feliz y positiva.
A todos nos gusta ganarnos el respeto, la aceptación, el reconocimiento de los demás y escuchar palabras de aliento. Tristemente, no siempre es así, no falta la persona tóxica.
Reconocerlas y saber conducirnos frente a ellas es de gran ayuda.
Si frente a cierta persona:
1 ¿Te pones de mal humor o te sientes menos después de una plática con ella?
2 ¿Te sientes poco atractivo(a) estando con ella?
3 ¿Te ignora?
4 ¿Te provoca dolor de cabeza, te tensa y sientes alivio cuando se va?
5 ¿Al hablarle tartamudeas o cambia de expresión tu cara?
Si tienes que responder "sí" a la mayoría de estas preguntas, no lo dudes: ésa es una persona tóxica para ti (aunque a lo mejor no lo sea para otros), pues está afectando negativamente tu comportamiento y tus sentimientos, condicionando tu vida.
Hay por ejemplo personas con baja autoestima que harán cuanto puedan para sabotear las relaciones, o para sentirse importantes a costa ajena, o para empequeñecer a los demás. Les molesta cuando otros tienen éxito, son atractivos, populares, cultos, etc.
Está claro que vivir dándole gusto a todo el mundo, es imposible, así como sacrificar ciertas cosas sólo para ser "aprobados". Lo que tenemos que hacer es amarnos y aceptarnos y comprender que para alguien siempre seremos una amenaza a su seguridad, sin una razón específica.
Con caridad pero con claridad mira a esas personas como tóxicas.
Hay varios tipos de "ellos". Por ejemplo:
El que a todo mundo critica
El del Club de la Lágrima Perpetua
El mosca-muerta
El chismoso
El que disfruta difundiendo malas noticias
El machista
El sabelotodo
El metiche
El que se cree simpático
El que jamás está contento
El que mira por el hombro de los demás...
Y muchos más....
Procura evitar el contacto con la gente tóxica, pero cuando esto no sea posible respira hondo y trata de comprenderla: es probable que no tenga suficiente amor en su vida.
Intenta convertir el mal rato en fortaleza interna y mantén el control mientras recibes el comentario o la actitud negativa... Piensa que éstas pueden ser simples reacciones al dolor, al vacío, a la soledad.
Así que, sin dejarte influir por ellas, trata de responderle a esa persona con respeto, cariño y paciencia.
Pero es igualmente importante que te preguntes, profunda y honestamente, si acaso tu también no estarás siendo tóxic@ para alguien.
"Somos del mismo material que se tejen los sueños...W.Shakespeare"
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